(este no es) el típico post sobre lo mejor del primavera sound que solo interesa si vas a ir al primavera sound y lo mismo ni eso. Jueves.

Nos vamos al primavera sound (bueno, Javi no)

El día que se pusieron a la venta las entradas del PS Fede me dijo que quería ir, que si me animaba. Y yo le dije que sí, pero Fede siempre dice que quiere ir a todos los sitios y después nunca va, así que no le hice mucho caso. Y a los tres días se agotaron los abonos. Fede estuvo toda la noche diciéndome MIERDA por wasap. Parece que esta vez sí que quería ir de verdad, pero yo que sé; es que él siempre dice que quiere ir a los sitios pero después nunca va.

A la mañana siguiente seguía recibiendo los wasap con MIERDA. Y yo tenía que hacer algo o dejar de vivir tranquilo hasta que se le pasara, así que le dije que si comprábamos tres entradas de día. Y eso hicimos. Así que, este año, Fede y yo vamos a ir al Primavera Sound.

Fede es la persona con la que he ido a más conciertos, pero nunca he ido a un festival fuera de Sevilla con él, porque cuando fue al Festimad y al Espárrago Rock yo no tenía dinero. Él es muy alto, casi dos metros. Y nunca tiene problemas para ver los conciertos. Sin embargo, sí los tiene con la ropa. Desde que le conozco está comprándose camisetas en los conciertos que después siempre le quedan cortas y no se pone. Y al final siempre viene en camisa a todos los sitios. Puede tener como mil camisetas heavies en un trastero, y nunca le he visto con ninguna. No sé qué se llevará al ps, pero seguro que al final son camisas.



El día más importante del primavera sound no es ninguno de los tres oficiales. Ni ese miércoles en el que ponen conciertos que molan mil y que los de fuera siempre nos perdemos (cómo me duele no ver el de greatest hits de Suede). El día más importante del primavera sound es en el que anuncian los horarios. Tan trágico como unos cuartos de un mundial cuando la selección española era humana, y molaba, y no era la máquina de matar que es ahora. Ahí es cuando te das cuenta de que, de los treinta conciertos que apuntaste que te interesaban más, veinticinco se solapan y tienes que decidir. Yo llevo dos semanas haciendo encaje de bolillos y llorando por dentro. Es muy duro.

Por eso, hay que tenerlo todo en cuenta. Y una de las cosas que he hecho es mirar en google maps qué distancia hay entre punta y punta del fòrum. 18 minutos andando. Porque yo hago esas cosas. Mirar qué distancia hay entre los escenarios para tenerlo en cuenta a la hora de hacer el planning. Lo que no tengo nunca en cuenta es que yo peso cien kilos y que después me voy a cansar y que la planificación se va a ir al carajo, pero eso es porque yo en mi mente soy muy delgado, como los indies de siempre, delgado y estiloso. Lo malo es que Fede mide casi dos metros y cada zancada suya son tres mías. Mi relación con él siempre ha sido ir tres pasos por detrás con la lengua fuera. Seguro que aquí también va a ser así. Por eso tengo que tener controladas todas esas cosas.



Y Fede puede que no haya mirado las distancias entre escenarios, pero sí que hace miles de excels para todo. Con sus baremos y sus porcentajes. Seguro que para el primavera tiene una en su móvil con todos los conciertos y las probabilidades de ver cada uno. Porque él no decide nada nunca, los excels lo deciden por él.

El Jueves 

El jueves va a ser un día raro, porque no está programado ninguno de mis conciertos esenciales. No moriría por ninguno. Pero aún así hay solapes con los que voy a llorar un poco. Porque yo soy muy dramático, lloro por cualquier cosa que no es importante. Creo que Fede muere por Explosions in the sky, pero yo me iré a ver a Vince Staples, por hacerme el guay. Yo querría ver a Kanye West o Drake, pero como no vienen, pues lo mismo Vince Staples. Igual hasta me llevo la gorra de Beemo por la broma. Pero luego me dará vergüenza y no la usaré. Seguro que no la uso.

También tenemos que decidir entre Suede haciendo el último disco y Car seat Headrest. Igual elijo a  estos últimos y después me voy a Empress of, que me suena a Björk mezclada con Rihanna y mola mucho. Y después tendremos que elegir LCD Soundsystem o Mbongwana Star. Entre que yo no soy muy de James Murphy y que Fede creció (y ya he dicho, creció mucho) escuchando al Trecet y repitiendo lo de "buscar la belleza", pues lo mismo acabamos con los africanos y nos perdemos el enésimo concierto del siglo del "ahora me voy, ahora no me voy" del Murphy. A Kamasi Washington, que parece que el artista cool del momento, le van a dar por saco. Porque a mí de momento no me gusta el Jazz. Que el Jazz solo gusta cuando uno madura, y yo aún no he madurado lo suficiente. Y creo que tampoco veré a Floating points. O lo mismo sí, si me aburro de Vince Staples. Fede sé que quiere ver a Tame Impala, así que le tendré que mandar un wasap y le diré "quillo, vente a Floating points que está siendo la hostia". Después vendrá y será mentira y se cabreará mucho, pero es que Tame impala son un bluff. Que lo sé yo.

Lo que nunca hago cuando planifico los festivales es dejar un hueco para comer. Porque beber se bebe en los conciertos, pero para comer en el primavera hay que hacer una cola de mil metros para un trozo de pizza. La cola empieza en el escenario H&M (porque en este ps hay un escenario h&m) y termina en el Pitchfork. Pero luego va rápido. A ver qué concierto me pierdo. Hace unos años fue TAB, pero eso fue por otra cosa. Por la mierda esa de la tarjeta digitalizada para no pagar con dinero. Espero que se hayan olvidado de ella, porque vaya mierda.

Y al final tengo apuntado a Fasenuova, pero entre que es a las tres de la madrugada, que el avión que nos lleva a Barcelona sale a las seis y media de la mañana y que no me drogo, a saber si aguantamos. Ya se verá.

Texto de Manolo Domínguez

Ilustraciones de Amaya Granell