miércoles, 24 de septiembre de 2014

every day is yours to win

Tres años harto. Low of defenses. Perezosa y tonta. I want to be well. What have I done to deserve this?. Para qué pensar. A day in the life. Please, please, please let me get what I want. Everyday is like sunday. Miquel a l'accés 14. Mistaken for strangers. She's lost control. Personal Jesus. Magic. Four tears in her face. Get me away from here, I'm dying. Lady Dilema. God only knows. Alone again or. More than this. Dins aquest iglú. El canto del bute. Un día usted morirá. Déjame llorar. Jugar con los coches. I don't know what I can save you from. Every day is yours to win

Todo eso son nombres de canciones. Canciones en las que se cuentan historias y vivencias al límite. Historias y vivencias muchísimo más emocionantes que las que vivo yo. Las vidas de los demás siempre son mejores y más entretenidas que las nuestras, ¿verdad?.

Por eso, tras una ruptura con la rutina de los últimos cinco años, con la comodidad de una estabilidad y un futuro cercano más o menos organizado, de repente uno lo rompe y se ve abocado al abismo del tiempo libre. De repente uno se ve inmerso en la temible hoja en blanco de su vida. En el protagonista (in)voluntario de todas las canciones del mundo. En la emoción y el miedo de estar metido en un proceso que no sabes cómo va a seguir y a terminar. Cómo si estuviera anclado en una primera estrofa y no supiera cuándo va a llegar el estribillo.

                                                                            (la imagen es de J. Aramburu)

lunes, 22 de septiembre de 2014

the drums, encyclopedia (2014)

A pesar de la sorpresa inicial con el primer single del disco (y primera en el tracklist), Magic Mountain, Encyclopedia no es una ruptura tan drástica en el sonido de The Drums como cabría pensar al escuchar esa canción. De hecho, es una continuación lógica a lo que ya nos ofrecieron en The Drums y Portamento.
Encyclopedia funciona como resumen de los diferentes sonidos que The Drums han ido tocando a lo largo de estos cinco años. Quizás con un tono más taciturno del que ya mostraba Portamento, pero (afortunadamente) igual de reconocible que sus predecesores.

Y aunque fue todo un shock la primera escucha de Magic Moutain, a la larga acaba funcionando (y de qué manera) como ruptura con las circunstancias que han llevado a este tercer disco: ahora vuelven a ser Jacob y Jonny, como cuando empezaron el grupo. Esto también le da al disco un matiz más personal, de autodeterminación. Algo así como The Drums contra el mundo.
 
 Aparte de Magic Mountain (Face of God y Let me también siguen esa senda) en Encyclopedia encontramos el ya identificable sonido del grupo, aunque también diversos elementos eléctronicos que ya incorporaron en Portamento.
Canciones como Bell laboratories o Wild geese (esta última rescatada del disco en solitario del año pasado de Jacob con Cascading Slopes) tienen esa electrónica oscura, relajada y extraña de la que tanto gusta el dúo. 

Kiss me again (que cuenta no con un estribillo, sino con dos) , I hope the time doesn't change him (esta es la mejor del disco, sin duda), Deep in my heart o There's nothing left son esas canciones infecciosas, poperas e irresistibles a las que nos tienen acostumbrados The Drums y por las que a mí se me hace difícil no quererlos.
También U.S. National Park o Break my heart ahondan en el sonido 60's de Down by the water, una de sus primeras canciones.

Encyclopedia acaba resultando, de nuevo, otro disco muy interesante de The Drums, ya alejados de los sonidos playeros,  pero todavía con tino para hacer buenísimas canciones de pop. 

martes, 16 de septiembre de 2014

introducing morrissey (dvd) y las ganas de volver a verle en concierto

Introducing Morrissey retrata la gira inglesa ocurrida a lo largo de todo el mes de febrero de 1995, en la que se presentaban las canciones de Your arsenal y Vauxhall & I. 
Esta grabación ya estaba disponible en vhs, pero ahora se publica en dvd por primera vez. Y todo sea dicho, conservando una muy buena calidad de imagen. 

El ambiente que se respira en los momentos previos a un concierto de Morrissey es algo único. La tensión, las ganas de venerar (también físicamente) o  algo que se me escapa, pero si muero por verlo de nuevo es por volver a vivir esos instantes. 

Introducing Morrissey no nos deja ver esos momentos del par de noches que recoge el directo y empieza fuerte con la rockabilly Billy Budd. A partir de ahí, lo que comentaba arriba, canciones de sus discos del 92 y 94. Da lo mismo. 
Yo no le pido a un concierto de Morrissey  un tracklist determinado. Le pido que asista. Y que durante un rato me haga creer que nuestras no son una mierda y que nos dijeron la verdad.

También le pido que sea capaz de cambiar las cosas y que a partir de esa noche mi vida ya no sea la misma. Que sea diferente, que cuente con su elemento diferenciador. Que no estamos hablando de algo para pasar el rato, esto es importante. Estamos hablando de algo que es más grande que nosotros.

 



domingo, 7 de septiembre de 2014

el quinto de interpol

No necesito que los grupos estén constantemente reinventándose. No porque tengan que hacerlo porque sí.
Si me gustan, me conformo con que sigan practicando lo que mejor se les da.

Interpol son un grupo de sonido marcado y reconocible. Una vez estás atrapado por su oscura melancolía, solo quieres más, una y otra vez. 
Por eso, solo les pido que sigan publicando buenos discos y grandes canciones, sin necesidad de cambio.

Interpol debutaron en 2002 con uno de los mejores discos de los últimos años. Con las influencias bien marcadas, pero con la personalidad suficiente como para crear uno de los discos más influyentes de la época.
Dos años más tarde, Antics continuaba el buen hacer del debut, dejándonos canciones como C'mere, Evil o Slow hands. Our love to admire, su tercer álbum (el gran tapado de su discografía), es una maravilla dónde absolutamente cada una de las canciones hiela la sangre.
Con Our love to admire, vuelven a marcar las distancias, consiguiendo otra vez un gran disco.

Pero, oh, en 2010 publican su disco homónimo, sin duda alguna su disco menos afortunado (ya confundiendo y despistando desde su portada). El nivel baja, las canciones también (aunque Lights ha ido creciendo con el tiempo y Barricade siempre fue un gran single) y  el tono general del disco no invita a muchas escuchas. 


Con El Pintor pasa un poco lo mismo. Están All the rage back home, Ancient ways (!qué canción¡), My desire o Everything is wrong, pero al contar con una parte central un poco dispersa no es un disco uniforme ni finalmente satisfactorio.

Con toda seguridad, todas estas dudas desapareceran en el momento en el que presenten el disco en directo, uno de los puntos fuertes del grupo. Donde se crecen y se hacen grandes, inmensos.

Como curiosidad, el bonus track para iTunes, The depths, es una de las mejores del disco, una canción fantástica y adictiva. 

jueves, 4 de septiembre de 2014

especial sobre world peace is none of your business (6 y último) con siguesiguepop

Sexta y última parte del especial sobre el nuevo disco de Morrissey, con Nacho, que no necesita presentación alguna. 

Muchísimas gracias a todos y cada uno de los participantes, por compartir con nosotros sus ideas, opiniones e impresiones sobre World peace is none of your business y Morrissey. 

!Muchas gracias!

Y aquí lo que nos cuenta Nacho:


He de confesar que me puse en serio con este disco a raíz de leerles a Carlos y Genís que se trata del trabajo más adictivo de Stephen Patrick, una constatación que, sinceramente, no me atrevo a afirmar ni a negar, pero que si ha servido para que lo escuche como un niño con zapatos nuevos, ha sido más que suficiente. 

Había perdido la fe en Morrissey, y probablemente “World peace is none of your business” no será el disco que me reconcilie con él, pero el hecho de que el Morri esté de actualidad después de innumerables recopilatorios y reediciones ya es más que una noticia.


Lo bueno de este disco es que todo es tan exagerado y tan pretencioso, ya desde ese exasperante título, que nada desentona. El epítome lo pone “Staircase at the university”, una canción que supera hasta en tres ocasiones el límite de la horterada. ¿Que a los dos minutos y medio de canción hay que meter unos vientos despendolados que recuerdan al subidón de “Nena” de Miguel Bosé? Pues se meten. ¿Qué llega el minuto 3:30 y hay que meter unas palmas? Pues ahí que van. ¿Qué nos falta para el minuto 4:30? ¿Un ritmo de guitarra española como homenajeando a Paco de Lucía? Pues ¡ea! Tenemos canción del mes, canción del año y canción de la vida. 


En realidad, creo que Morrissey se ha convertido en un guilty pleasure para mí, y sí, me parece que estoy hablando de algo que me encanta.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

especial sobre world peace is none of your business (5) con ifrannnn

Fran es ya conocido del blog. Ya participó en el top 10 colectivo de los Smiths que realizamos hace unos meses y ahora comparte con nosotros su opinión sobre el décimo disco de Morrissey. 

Por cierto, a partir de ahora puedes consultar las diversas colaboraciones de amigos y conocidos, a través de las etiquetas ubicadas a la derecha de la página.

Ahí van las impresiones de Fran:

Quizás mi opinión va a ser la única nota discordante en este especial, pero lo primero que tengo que decir es que World Peace Is None Of Your Business es, de momento, el disco de Morrissey que menos me gusta.

Mi primer contacto con Morrissey fue en la época de The Queen Is Dead, cuando lo encontré por casualidad en la cara b de una cinta de cassette reciclada en la que mi primo me había grabado True Blue de Madonna después de levar todo el verano dándole la lata con ello. 

Por aquel entonces yo no debía tener más de trece o catorce años y aquel hallazgo fue uno de los que cambiaron mi forma de ver y entender la música (luego sabría que la Ciconne había aprendido a tocar la guitarra con las canciones de The Smiths y que incluso los había taloneado en alguna ocasión). 
 Aquel puñado de canciones fueron las primeras que me emocionaron hasta el punto de ponerme un nudo en la garganta sin entender muy bien por qué. A partir de ahí, esa sensación se repitió con todos y cada uno de los discos de The Smiths que fui consiguiendo y también con los de Morrissey en solitario. Lo mismo hasta Years Of Refusal, que me dejó un regusto agridulce. Por este motivo esperaba el nuevo material con especial impaciencia, pero mi decepción ha sido la misma que con su predecesor, aunque este vez por otros motivos. Igual mis expectativas eran demasiado elevadas…

El caso es que no sé dar una razón concreta y de peso por la que World Peace In None Of Your Business no vaya a ser precisamente mi disco favorito de Morrissey, sino que, más bien, se trata de un conjunto de pequeños detalles. El principal, y que está directamente relacionado con las canciones, que es lo que importa, es la producción y los arreglos. 

Siempre me han dado alergia los arreglos de “aire latino” y este disco está plagado de ellos hasta el punto de convertirse en los verdaderos protagonistas de varias de las canciones. Es el caso de Earth Is The Loneliest Planet (con otra “vestimenta” podría haber sido otra más en mi lista de hits particular, pero…) o Staircase At The University (las guitarras y palmas del tramo final me llegan a sacar de quicio y no puedo evitar dar el salto a la siguiente, bueno, a la siguiente de la siguiente, porque Bullfighter Dies tampoco es santo de mi devoción). 
Pero claro, en el extremo opuesto de todo esto están I Am Not A Man; con el Morrissey que más me gusta, el de esas letras ácidas e irónicas; o Smiler With Knife que es una maravilla absoluta dónde no sobra ni falta una sola nota.

Luego hay otro motivos, digamos, extramusicales que han hecho que haya recibido este lanzamiento con ciertas reticencias. Por una parte, está el hecho de que pocas semanas antes se reeditara Vauxhall And I, mi favorito absoluto de Morrissey. La cercanía temporal ha hecho que mi subconsciente los considere como discos consecutivos y claro, en la inevitable comparación, World Peace… no podía salir muy bien parado. 


Por otro lado, está el formato en que ha sido presentado: cuatro singles/adelantos digitales sin ningún otro valor añadido. World Peace… es un disco excesivamente largo ya sin contar con el añadido de los temas extra de la edición deluxe y podría haber tenido un recorrido totalmente distinto si los singles hubiesen sido también físicos, más espaciados en el tiempo, y esos temas extra usados como “cara b”.

Seguro que la gran mayoría de los que leáis estas líneas sabréis de aquellas declaraciones de Nacho Vegas en las que afirmaba, sin ningún tipo de reparo, que deseaba que Morrissey se lo follara. Pues bien, hace algún tiempo yo también me habría apuntado en la lista sin dudarlo, pero hoy todo ha cambiado: 

“Lo siento Mozzer, pero creo que necesitamos darnos un tiempo porque yo ya no siento lo mismo. No sé si es que tú no consigues explicarte o es que yo no consigo entenderte. Probablemente los dos hayamos cambiado. Espero que esto sea sólo un paréntesis y que, algún día, las cosas vuelvan a ser como antes. Si no, me quedará el recuerdo de todos estos estupendos años compartidos"


World Peace Is None Of Your Business es como un polvo sin ningún sentimiento, sólo sexo, que puede estar muy bien según en qué momento, pero todos sabemos que no es lo mismo y deseamos algo más.

martes, 2 de septiembre de 2014

especial sobre world peace is none of your business (4) con manuel ríos

Seguro que todo fan de Morrissey conoce a Manuel Ríos.
Manuel Ríos formó parte de Alpino, también ha compuesto para Fangoria y claro, es fan militante de Morrissey. 

Ahora mismo lleva este blog sobre Steven Patrick que podéis consultar aquí.

Estas son sus impresiones sobre cada una de las canciones de World peace is none of your business

DISCAZO

El desgarro de la guitarra arrastra a Morrissey en World Peace Is None Of your Business, con un atisbo de esperanza. 
La enigmática Neil Cassady Drops Dead con su ternura y su pregunta del millón al final. 
Morrissey marcando diferencias con todo aquello que desprecia. Fuera etiquetas en I’m Not A Man. Cada hombre es un mundo. 

Istanbul te envuelve y parece que estás viendo a ese padre buscando a su hijo por las calles; ambiente cinematográfico. Una pequeña película de triste final. 
Earth Is The Loneliest Planet. Existencialismo y soledad. Da igual lo que hagas. No hay manera. 

Humor negro a lo Girlfriend In A Coma como nadie más sabe hacerlo en la glamurosa Staircase At The University. 
 The Bullfighter Dies y no lloro. En un mundo nadie debería morir así, pero es lo que hay y yo sé de qué parte estoy. 
Ya no te pide que le dejes besarte Ahora te exige que le beses en Kiss Me A Lot. Tú eliges el sitio. 

Smiler With Knife. Sensualidad, sexo y muerte a flor de piel. 
Tocan campanas ¿ha muerto? en Kick The Bride Down The Aisle. Nos quedamos con las ganas de saber qué hará al final el protagonista. 
Historia y poesía en Mountjoy. Parece que va a cantar Nico en cualquier momento. 
Hay un Oboe Concerto para cada uno de nosotros que marca nuestro ritmo en la vida. Bebamos por nuestros muertos. 

Desde Scandinavia con amor, dramatismo y entrega. Más muerte. 
One Of Our Own. El soldado que dio la vida por otro interponiéndose en el campo de batalla. “I’d still leap in front of flying bullet for you” sigue vigente… Confesion de amor en el cementerio. 

Drag The River. Eso, buscad en el rio a esa chica suicida que intenta atraer a otros hasta el fondo. 

Un secreto difícil de olvidar hasta la tumba, sin dudar, cueste lo que cueste. Forgive Someone. 
Si quieres, te puedes tumbar con Julie In The Weeds y ver la vida pasar. Puedes protegerla. 

Art-Hounds. Mi favorita y punto